Roosevelt, presidente
de los Estados Unidos de América, fue destacado por su política de
lucha contra la pobreza.
Frente
al reto de la «gran depresión», Roosevelt impulsó un programa político conocido
como New Deal .
Pero, ¿qué
conocemos del programa que llevó a cabo?
El
New Deal se trata de un conjunto de medidas adoptadas por el gobierno de
Franklin D. Roosevelt para hacer frente a los estragos causados por la Gran Depresión.
Las medidas que más destacaron fueron los siguientes:
En primer lugar, lleva a cabo la apertura de los bancos que son
solventes y todos ellos bajo el control del Departamento del Tesoro. En poco
tiempo logró que la situación bancaria volviese a la normalidad y que los
depositantes volviesen a confiar en los bancos.
En segundo lugar, se abandona el patrón oro. Muchos economistas,
incluyendo a Keynes, consideraba que fue una de las causas que empeoró la situación
tras producirse el crack del 29.
En tercer lugar, la Ley Glass-Stergall, pudo separar las
actividades de los bancos comerciales y las actividades de inversión. Esto hizo
que se pusiese fien a acciones especulativas.
En cuarto lugar, estableció la Ley de Tarifas Recíprocas,
permite la celebración de acuerdos bilaterales de libre comercio con otros países.
Por último, se aprobó el “Social Security Act”, la Ley del
Seguro Social, considerada como una de las decisiones mas importantes, en las
que se establece un sistema universal de pensiones de jubilación. Esto crea el
seguro de desempleo y unos beneficios sociales para niños y enfermos. Todas
estas medidas fueron financiados mediante impuestos a las bebidas y las rentas
no distribuidas de las empresas.
Las consecuencias del New Deal supuso un beneficio para los
ciudadanos de la época; ya que, se produjo un aumento en la libertad de las
empresas, disminuyó el número de desempleados de 14 millones a 7,5 millones
entre 1933 y 1937 y los trabajadores consiguieron más poder con la creación de
una segunda central sindical.
Por lo tanto, podemos observar como Roosevelt dirigió su política
a realizar grandes obras públicas. No fueron construcciones aleatorias, sino
orientadas a ofrecer un empleo futuro.